Sudán             

 

Sudán:
Durante los años de colonización la administración británica optó por concentrar las inversiones en la zona norte. El contraste con el escaso nivel de desarrollo del sur se volvió muy patente. Los gobiernos que se sucedieron tras la independencia, entre ellos el militar (1958 a 1964) fueron incapaces de aceptar una constitución permanente o solucionar problemas como el faccionalismo, el estancamiento económico, y la disidencia étnica. Muchos de los conflictos étnicos nacen entre los habitantes del norte (musulmanes que representan el 70% de los habitantes), y los del sur (africanos animistas, 25%, y cristianos, 5%). La insatisfacción condujo al golpe (25 de mayo de 1969) del coronel musulmán Yaffar al-Numeiry. El nuevo régimen abolió el parlamento e ilegalizó todos los partidos políticos. Siguieron años de conflictos armados entre el gobierno sudanés, con mayoría de árabes y musulmanes del norte, contra los no musulmanes en el sur. Con la paz de 1972 Yaffar al-Numeiry pone fin a una etapa del conflicto que había durado 17 años.

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En septiembre de 1983 el presidente Yaffar al-Numeiry, creó un estado federal que incluía tres estados federales en Sudán del Sur. Posteriormente introdujo la ley de la sharia y disolvió los tres estados federales del sur, lo que provocó la Segunda Guerra Civil Sudanesa. Debido a la escasez de combustible y pan, una insurgencia creciente en el sur, la sequía y la hambruna, se produjo el 6 de abril de 1985 otro golpe militar dirigido por el general Suwar al-Dahab, que restauró un gobierno civil. Sin embargo la guerra civil se intensificó y la economía continuó deteriorándose.

Régimen de Omar el-Bashir:
En 1989 el general musulmán Omar el-Bashir dió un golpe de estado y se convirtió en presidente y jefe de estado, primer ministro y jefe de las fuerzas armadas. Aliado con el Frente Islámico Nacional de Sudán, inició un proceso de islamización del país, sobre todo en la parte norte plenamente controlada por su ejército. El 16 de octubre de 1991 fue disuelto el Consejo Revolucionario que había provocado el golpe de estado de 1989 y fue nombrado Presidente de la República. En 1996, para legitimar su poder, celebró un plebiscito que le eligió como Jefe de Estado con todos los poderes de que gozaba hasta ese momento. En 1998 se aprobó una nueva constitución que permitía determinadas asociaciones políticas muy limitadas y creó la Asamblea Nacional, pero en diciembre de 1999, ante el peligro de perder el poder a manos del Frente Islámico, declaró el estado de emergencia, disolvió el gobierno y se deshizo de los elementos del Frente Islámico. Mantiene el conflicto con el sur, aunque mitigado por un alto el fuego, y en la zona occidental de Darfur, donde no se le reconoce como Presidente. Acusado de ayudar a grupos terroristas islámicos y haber dado cobijo a Osama bin Laden, se le considera por EE.UU. desde 1997 una amenaza internacional y está incluido desde 2001 en la lista de los siete países del mundo que albergan y patrocinan el terrorismo internacional. En 1998 EE.UU. lleva a cabo un ataque aéreo sobre una fábrica que se decía producía material susceptible de ser usado como armas químicas, hecho nunca comprobado. La segunda guerra civil desplazó a más de cuatro millones de habitantes del sur. Los refugiados se dirigieron a ciudades del sur como Yuba, Jartum en el norte, y países vecinos. En 2010 el-Bashir ganó unas elecciones boicoteadas por los partidos de la oposición, que denunciaron la falsificación de los resultados de los comicios. En 2014 el-Bashir insta repetidamente a la retirada de la UNAMID, una misión que según él es utilizada como protección de los rebeldes y no de la población. Durante 2014 frecuentes incidentes violentos se producen al paso de refugiados (unos 300.000) que regresan a sus lugares de origen desde los campamentos.

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Insurgencia secesionista:
En 2001 efectivos armados de varios grupos de liberación llevan a cabo ataques contra el ejército sudanés. El gobierno de Sudán arma a los grupos yanyauid y les presta apoyo para frenar los ataques de los frentes de liberación. Desde 2003 en la región de Darfur se lleva a cabo un exterminio de la población negra por parte de los yanyauid. Aunque la ONU no ha calificado esta persecución étnica como genocidio las inspecciones detallan la destrucción hasta sus cimientos de las poblaciones en función de la etnia de sus habitantes. En enero de 2006 se firman los acuerdos de Trípoli poniendo fin a la guerra Sudán-Chad, causada por las incursiones de las milicias Yanyawid en territorio del Chad. En agosto de 2006 el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución para enviar una nueva fuerza de pacificación a la zona de 17.300 soldados, en sustitución de los efectivos de la Unión Africana. En 2007 se llegó al acuerdo de desplegar 26.000 tropas de la ONU. Las fuerzas de la UNAMID incluyen tropas aportadas por la Unión Africana. En 2009 la Corte Penal Internacional emitió una orden de captura de Omar el-Bashir por crímenes de guerra y contra la humanidad en la región de Darfur. La ONU trabaja con documentos que arrojan una cifra de 400.000 muertos y dos millones de desplazados. Otros cálculos seguramente más acertados elevan el número de muertos a 750.000. En 2011 se votó un referéndum con el que se busca dar fin a los problemas étnicos y territoriales. Conlleva la escisión en dos entidades nacionales; una al norte musulmán y pro-árabe y otra al sur, de tendencia tradicional y animista.

Persecución de los crímenes de guerra:
La fiscal jefe de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, anunció en 2014 que no pudo avanzar en las investigaciones sobre los crímenes de guerra ante la falta de colaboración de los gobiernos de la zona y la falta de apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU, donde China, aliado tradicional de Jartum veta la intervención. Sudán no reconoce la competencia de la justicia internacional. No se ha conseguido arrestar a Omar el Bachir, acusado de genocidio en 2009. Chad no colabora y el presidente de Uganda Yoweri Museveni, aboga por un boicot a una ONU que sólo nos persigue a nosotros. En sus 12 años de actividad la CPI sólo ha logrado cerrar el caso del señor de la guerra congoleño Thomas Lubanga, condenado por reclutar niños soldado. La CPI tiene abiertos seis procesos que afectan a países africanos: República Centroafricana, Libia, Costa de Marfil, Uganda y República del Congo.

Enfrentamiento Kiir/Machar (2014):
Según Ferrán Puig, director de Oxfam en Sudán del Sur desde febrero de 2012, el enfrentamiento armado entre el Gobierno del presidente Salva Kiir y los disidentes del exvicepresidente Riek Machar dificultó a los agricultores sembrar antes de la temporada de lluvias, que comienza en abril. Machar cumplió con el acuerdo alcanzado el 17 de enero para un alto el fuego, tras semanas de combates entre las fuerzas gubernamentales, principalmente de etina dinka, y los sublevados, mayoritariamente nuer. Como consecuencia de estos enfrentamientos armados murieron miles de personas y más de un millón se han vieron obligadas a huir de sus hogares. El 60% de los 12 millones de sursudaneses viven en un entorno rural, lo que agrava el riesgo de crisis alimentaria. El país cuenta con una importante cabaña de ganado, pero las vacas son fundamentalmente una fuente de prestigio social y sólo las matan para comer como último recurso. Cientos de miles de personas huyeron por miedo a las matanzas interétnicas y se encuentran hacinados en los campamentos de refugiados improvisados levantados dentro de las bases de la Misión de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS). El conflicto llevó a Sudán del Sur, declarado independiente desde 2011, al borde de la guerra civil. Ambas partes accedieron a participar en un proceso de paz patrocinado por la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo (IGAD), un bloque regional integrado por Etiopía, Kenia, Somalia, Sudán, Uganda, Yibuti, Eritrea y Sudán del Sur. Los países limítrofes presionaron conjuntamente hasta lograr un alto el fuego negociado en Addis Abeba. La mitad de la población vive por debajo del umbral de la pobreza (menos de 1, 25 dólares diarios de ingresos) y unos 4 millones de personas no cubren sus necesidades nutricionales. Sudán del Sur cuenta con un solo puente y apenas 100 kilómetros de carreteras asfaltadas en un territorio de una extensión similar a la de Francia.


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