
Valor: Citas:
Arriesgarse:
Guerra:
Miedo:
Temor:
El valiente tiene miedo del contrario; el cobarde, de su propio temor.
Evitad las decisiones desesperadas; pasará el día más tenebroso si tenéis valor para vivir hasta el día siguiente.
El verdadero valor consiste en prever todos los peligros y despreciarlos cuando llegan a hacerse inevitables.
Tanto miedo tengo, que aun para huir valor no tengo.
El verdadero valor consiste en saber sufrir.
Demasiado poco valor es cobardía y demasiado valor es temeridad.
La excelencia moral es resultado del hábito. Nos volvemos justos realizando actos de justicia; templados, realizando actos de templanza; valientes, realizando actos de valentía.
El valor es el resultado de un grandísimo miedo.
Es valiente el que teme lo que debe temerse, y no teme lo que no debe temerse.
Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo está perdido y hay que empezar de nuevo.
Querer, es tener el valor de exponerse a un inconveniente; exponerse así es tentar al acaso y es jugar.
El valor, la buena conducta y la perseverancia conquistan todas las cosas y obstáculos que quieran destruirlas y se interpongan en su camino.
El valor es hijo de la prudencia, no de la temeridad.
El verdadero valor consiste en hacer uno sin testigos lo que sería capaz de hacer ante todo el mundo.
Intenta no volverte un hombre de éxito, sino volverte un hombre de valor.
El éxito no es definitivo, el fracaso no es fatídico. Lo que cuenta es el valor para continuar. Winston Churchill
A lo hecho, pecho.
Mientras el tímido reflexiona, el valiente va, triunfa y vuelve.
La desesperación infunde valor al cobarde.
No puede uno ser valiente si le han ocurrido sólo cosas maravillosas.
Para conocer la dicha hay que tener el valor de tragársela.
Me gustaría ser valiente. Mi dentista asegura que no lo soy.
Hay que tener el valor de decir la verdad, sobre todo cuando se habla de la verdad.
Es preciso saber lo que se quiere; cuando se quiere, hay que tener el valor de decirlo, y cuando se dice, es menester tener el coraje de realizarlo.
El valor nunca es mayor que cuando nace de la última necesidad.
El valor espera; el miedo va a buscar.
El valor de un acto se juzga por su oportunidad.
El ignorante tiene valor; el sabio miedo.
El equilibrio mental, juicio recto, valor moral, audacia, resistencia, forma de tratar al prójimo y cómo sacar el mayor bien de los contratiempos son cosas que no se aprenden en la escuela.
Nadie puede librar a los hombres del dolor, pero le será perdonado a aquel que haga renacer en ellos el valor para soportarlo.
A la muerte se le toma de frente con valor y después se le invita a una copa.
Mucha gente cree que discrepa de los demás y lo que pasa es que no tienen valor para hablar unos con otros.
El libro es fuerza, es valor, es fuerza, es alimento; antorcha del pensamiento y manantial del amor.
Valor es lo que se necesita para levantarse y hablar; pero también es lo que se requiere para sentarse y escuchar.
¿Qué sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo?
La creatividad requiere tener el valor de desprenderse de las certezas.
Tened el valor de equivocaros.
Donde hay una empresa de éxito, alguien tomó alguna vez una decisión valiente.
Una buena acción es una lección insolente para los que no tienen el valor de ejecutarla.
Los cobardes agonizan muchas veces antes de morir... Los valientes ni se enteran de su muerte.
El coraje no se puede simular: es una virtud que escapa a la hipocresía.
Hace falta más valor para sufrir que para morir.
Valiente es aquel que no toma nota de su miedo.
Hay maridos tan injustos que exigen de sus mujeres una fidelidad que ellos mismos violan, se parecen a los generales que huyen cobardemente del enemigo, quienes sin embargo, quieren que sus soldados sostengan el puesto con valor.
El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no sólo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y sólo queda la desesperación muda; y al final, el miedo llega a expulsar del hombre la humanidad misma.
De lo que tengo miedo es de tu miedo.
No hay que tener miedo de la pobreza ni del destierro, ni de la cárcel, ni de la muerte. De lo que hay que tener miedo es del propio miedo.
No hay medicina para el miedo.
El miedo guarda la viña.
El hombre que tiene miedo sin peligro, inventa el peligro para justificar su miedo.
Nadie llegó a la cumbre acompañado por el miedo.
Para quien tiene miedo, todo son ruidos.
Aquel que más posee, más miedo tiene de perderlo.
Jamás negociemos con miedo, pero jamás temamos negociar.
Sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar.
El miedo puede llevar a los hombres a cualquier extremo.
El miedo es un sufrimiento que produce la espera de un mal.
El miedo es más injusto que la ira.
El miedo reina sobre la vida.
No hay cosa de la que tenga tanto miedo como del miedo.
Mejor se puede disculpar el que se muere de miedo, que el que de miedo se mata: porque allí obra sin culpa la naturaleza; y en éste, con delito y culpa, el discurso apocado y vil.
Nunca tengas miedo del día que no has visto.
Todos los problemas tienen la misma raíz: el miedo, que desaparece gracias al amor; pero el amor nos da miedo.
El miedo es mi compañero más fiel, jamás me ha engañado para irse con otro.
No hace falta conocer el peligro para tener miedo; de hecho, los peligros desconocidos son los que inspiran más temor.
Los tímidos tienen miedo antes del peligro; los cobardes, durante el mismo; los valientes, después.
Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo... del miedo al cambio.
La mayoría de las personas tienen miedo a la muerte porque no han hecho nada de su vida.
La idea de ser presidente me da miedo, y no pienso que quiera el trabajo.
El valor espera; el miedo va a buscar.
El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son.
El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente.
Cualquier cosa que el hombre gane debe pagarla cara, aunque no sea más que con el miedo de perderla.
No temas ni a la prisión, ni a la pobreza, ni a la muerte. Teme al miedo.
El miedo no es más que un deseo al revés.
Entre los que son igualmente malos no hay paz si no es la impuesta por el miedo de alguno que es peor.
El corazón que está lleno de miedo, ha de estar vacío de esperanza.
El miedo es la forma de nuestra subordinación a las leyes físicas.
Como el miedo es el mayor suplicio de los tiranos, el crimen más irremisible a sus ojos, es hacerles sentir miedo.
Tanto miedo tengo, que aun para huir valor no tengo.
Nunca releo mis libros, porque me da miedo.
La ignorancia es madre del miedo.
No es tan fiero el león como lo pintan.
Valiente es aquel que no toma nota de su miedo.
Teme al hombre de un solo libro.
Temo a un solo enemigo que se llama, yo mismo.
Quien vive temeroso, nunca será libre.
Quien todo lo puede ha de temerlo todo.
Nunca se teme bastante al confiar en otro.
Muchos no creen en nada, pero temen a todo.
Los peores embusteros son los propios temores.
Dejamos de temer aquello que se ha aprendido a entender.
Bajo la máscara de la temeridad se ocultan grandes temores.
El deseo vence al miedo.
El que tiene miedo de la pobreza no es digno de ser rico.
El que teme sufrir ya sufre el temor.
El que es temido por muchos, debe temer a muchos.
La violencia no es sino una expresión del miedo.
El que teme es un esclavo.
El valor es el resultado de un grandísimo miedo.
Siempre hay peligro para aquellos que lo temen.
Mejor es morir de una vez que estar siempre temiendo por la vida.
El miedo es mal maestro para dar lecciones de virtud.
Hay personas a las que la fortuna no les procura más que miedo de perderla.
¿Miedo a la muerte?. Uno debe temerle a la vida, no a la muerte.
Conceder el perdón es el más alto grado de vanidad o de miedo.
La felicidad para mi consiste en gozar de buena salud, en dormir sin miedo y despertarme sin angustia.
El instinto social de los hombres no se basa en el amor a la sociedad, sino en el miedo a la soledad.
Teme a quien te teme, aunque él sea una mosca y tú un elefante.
Siempre se ha de conservar el temor, más jamás se debe mostrar.
Si no tenemos miedo de los hombres y buscamos sólo la verdad de Dios, estoy seguro de que todos podremos ser sus mensajeros. En lo que a mi respecta, creo sinceramente que respondo a estas dos condiciones.
Quien ha perdido la esperanza ha perdido también el miedo: tal significa la palabra "desesperado".
No conviene hablar del pudor como de una virtud. Se parece más bien a una emoción que a una disposición adquirida. Se define, pues, como un miedo de dar de sí una mala opinión.
Las religiones son fundadas en el miedo de muchos y en la vivacidad de pocos.
La violencia es miedo de las ideas de los demás y poca fe en las propias.
La violencia es el miedo a los ideales de los demás.
La fuente de todas las miserias para el hombre no es la muerte, sino el miedo a la muerte.
En muchos casos hacemos por vanidad o por miedo, lo que haríamos por deber.
El valiente tiene miedo del contrario; el cobarde, de su propio temor.
El ignorante tiene valor; el sabio miedo.
El colmo de la infelicidad es temer algo, cuando ya nada se espera.
Cuando se teme a alguien es porque a ese alguien le hemos concedido poder sobre nosotros.
A veces en la vida hay que saber luchar no sólo sin miedo, sino también sin esperanza.
Un hombre tiene que tener siempre el nivel de la dignidad por encima del nivel del miedo.
No tenía miedo a las dificultades: lo que la asustaba era la obligación de tener que escoger un camino. Escoger un camino significaba abandonar otros.
A cada día le bastan sus temores, y no hay por qué anticipar los de mañana.
Ya a mi edad no se le teme a nadie, cuando no se le teme a la muerte.
Los terroristas intentan modificar nuestro comportamiento provocando miedo, incertidumbre y división en la sociedad.
Sólo hay dos palancas que muevan a los hombres: el miedo y el interés.
El ánimo que piensa en lo que puede temer, empieza a temer en lo que puede pensar.
Son moderados todos los que tienen miedo o todos los que piensan traicionar de alguna forma.
Hay mucha gente que no cree en nada, pero que tiene miedo de todo.
Tened miedo de aquellas que eclipsan, siendo feas, a las bellas.
La razón de que todos seamos tan amigos de pensar bien de los demás, es que todos tememos por nosotros mismos. La base del optimismo es simplemente el miedo.
La obediencia simula subordinación, lo mismo que el miedo a la policía simula honradez.
Mostrarse asustado sin motivo aparente es dar a conocer que se tiene razón de temer.
El hombre más peligroso es aquel que tiene miedo.
La esperanza y el temor son inseparables y no hay temor sin esperanza, ni esperanza sin temor.
Siempre se ha de conservar el temor, más jamás se debe mostrar.
El temor empieza toda sabiduría, y quien no tiene temor, no puede saber.
Algunos se equivocan por temor a equivocarse.
No es tan fiero el león como lo pintan.
Teme al hombre de un solo libro.
Temo a un solo enemigo que se llama, yo mismo.
Quien vive temeroso, nunca será libre.
Quien todo lo puede ha de temerlo todo.
Nunca se teme bastante al confiar en otro.
Muchos no creen en nada, pero temen a todo.
Mayor es el peligro cuando mayor es el temor.
Los peores embusteros son los propios temores.
Donde acaba el deseo comienza el temor.
Dejamos de temer aquello que se ha aprendido a entender.
Bajo la máscara de la temeridad se ocultan grandes temores.
El temor y la esperanza nacen juntos y juntos mueren.
El que es temido por muchos, debe temer a muchos.
El que teme es un esclavo.
Siempre hay peligro para aquellos que lo temen.
Mejor es morir de una vez que estar siempre temiendo por la vida.
Teme a quien te teme, aunque él sea una mosca y tú un elefante.
No ha aprendido las lecciones de la vida quien diariamente no ha vencido algún temor.
No hace falta conocer el peligro para tener miedo; de hecho, los peligros desconocidos son los que inspiran más temor.
La voz interior me dice que siga combatiendo contra el mundo entero, aunque me encuentre solo. Me dice que no tema a este mundo sino que avance llevando en mí nada más que el temor a Dios.
El valiente tiene miedo del contrario; el cobarde, de su propio temor.
El éxito consiste en vencer el temor al fracaso.
El colmo de la infelicidad es temer algo, cuando ya nada se espera.
Cuando se teme a alguien es porque a ese alguien le hemos concedido poder sobre nosotros.
Cualquier cosa que el hombre gane debe pagarla cara, aunque no sea más que con el miedo de perderla.
¿Quieres dejar de pertenecer al número de los esclavos? Rompe tus cadenas y desecha de ti todo temor y todo despecho.
¿Qué es la avaricia? Un continuo vivir en la pobreza por temor a ser pobre.
La base de todas las sociedades grandes y duraderas ha consistido, no en la mutua voluntad que los hombres se tenían, sino en el recíproco temor.
Ningún gobierno puede sostenerse sin el principio del temor así como del deber. Los hombres buenos obedecerán a este último, pero los malos solamente al primero.
A cada día le bastan sus temores, y no hay por qué anticipar los de mañana.
No hay condición tan baja que no tenga esperanzas, ni ninguna tan alta que no inspire temor.
Es hermoso que los padres lleguen a ser amigos de sus hijos, desvaneciéndoles todo temor, pero inspirándoles un gran respeto.
La más peligrosa de todas las debilidades es el temor de parecer débil.
No temas ni a la prisión, ni a la pobreza, ni a la muerte. Teme al miedo.
Ya a mi edad no se le teme a nadie, cuando no se le teme a la muerte.
Los libros son, entre mis consejeros, los que más me agradan, porque ni el temor ni la esperanza les impiden decirme lo que debo hacer.
El ánimo que piensa en lo que puede temer, empieza a temer en lo que puede pensar.
No hay amor sin temor de ofender o perder lo que se ama.
Salen errados nuestros cálculos siempre que entran en ellos el temor o la esperanza.
El miserable temor de ser sentimental es el más vil de todos los temores modernos; más vil aún que el terror que ha dado origen a la higiene.
